Alemania ha introducido cambios en su legislación en materia de circulación, incrementando las cuantías de las multas y creando nuevas sanciones. Entre las novedades, ahora se contempla una multa de 55 euros para quien aparque un vehículo de combustión en una plaza de aparcamiento para vehículos eléctricos.

Aparcar un coche de combustión en una plaza para coches eléctricos tendrá multa en Alemania
Aparcar un coche de combustión en una plaza para coches eléctricos tendrá multa en Alemania

Alemania ha anunciado un leve endurecimiento en los castigos por diversas infracciones de circulación, entre las que se encuentran multas más cuantiosas por exceder los límites de velocidad pero también sanciones por aparcar un coche de combustión en una plaza destinada para coches eléctricos e híbridos enchufables.

Por regla general, se ha duplicado la cuantía de la multa de sanciones que ya existían y se han creado infracciones nuevas que afectan a todos los usuarios de la vía, desde ciclistas hasta vehículos de gran tonelaje, pasando por coches, tanto particulares como de uso compartido.

Los cambios en la legislación alemana contemplan ahora una multa de 55 euros para quienes aparquen un vehículo de combustión en una plaza de aparcamiento para vehículos eléctricos. Es la misma cuantía que se aplicará a quien aparque ilegalmente en plazas reservadas para minusválidos (antes esta multa era de 35 euros) o por estacionar vehículos particulares en una plaza con prioridad para coches de uso compartido.

Multar como solución a donde el civismo no llega

En aras de ayudar a impulsar la movilidad eléctrica, y por una cuestión puramente lógica, los puntos donde hay cargadores para vehículos eléctricos suelen tener reservada una o dos plazas de aparcamiento por cada cargador. De esta manera, los usuarios de coches eléctricos o híbridos enchufables que necesiten recargar su vehículo al llegar al destino (en un centro comercial, por ejemplo), pueden tenerlo más fácil.

Normalmente estas plazas tienen cargadores para recargar la batería del coche, así que el problema no es tanto haber quitado el hueco de aparcamiento, sino que imposibilita la recarga a quien pueda necesitarlo.

Sin embargo, con menor o mayor frecuencia, a veces los usuarios de coches eléctricos se encuentran con que la plaza reservada para estos vehículos está ocupada por un coche de combustión. No sólo eso: a veces hay estacionado un coche eléctrico que no está usando el cargador, por lo que también está haciendo un uso indebido del espacio y perjudicando potencialmente al resto de usuarios.

La proporción de este tipo plazas suele ser baja en relación al total del parking en cuestión; en cualquier caso, y aunque sean las únicas plazas libres en todo el aparcamiento, obstaculizarlas indebidamente es un acto claramente incívico que puede potencialmente a otros ciudadanos. Lo ideal sería respetar siempre el uso que están concebidas pero, en la práctica, la medida disuasoria que mejor parece funcionar es tocar el bolsillo del posible infractor.

También aumentan las sanciones por exceso de velocidad

Alemania ha aprovechado este cambio en la normativa a nivel estatal para establecer nuevas sanciones por exceso de velocidad tanto en vías urbanas como interurbanas. Al contrario de lo que mucha gente todavía cree, incluso las autopistas alemanas (Autobahn) tienen un límite genérico de velocidad establecido en 130 km/h. Solamente algunos tramos concretos no tienen límite de velocidad, simplemente una recomendación de no superar los 130 km/h.

En autovías y autopistas se han establecido sanciones en diez tramos o niveles, que van desde los 20 euros (si se supera en hasta 10 km/h el límite establecido) hasta los 600 euros y 2 puntos si se excede el límite en 70 km/h o más.

Fuente: hibridosyelectricos